Autopsia del indignado español

Ésta es la historia del país que llegó a construir más casas que Alemania, Francia e Italia juntas. El país con la mayor tasa de cocaína por nariz de toda Europa y capital mundial de los billetes de quinientos. Una nación de emprendedores siempre dispuestos a poner en práctica innovadores planteamientos empresariales, como un aeropuerto sin aviones o un estudio de cine sin rodajes. Un país tan vibrante que los jóvenes apenas podían esperar a terminar su formación para lanzarse al mundo laboral. Y, de hecho, no esperaban. De ahí que, entre los récords nacionales, se encontrase también el de abandono escolar.

Así empieza mi «Autopsia del indignado español», que publico en la Orsai 7 y que puedes leer aquí.

21 comentarios

  • Me niego a leer algo para lo que tenga que ser un malabarista del ratón. ¡Qué puto mareo!

  • Lo mejor de todo es que dentro de quince años, cuanto todo haya pasado y la gente vuelva a tener calderilla en los bolsillos, nos la volverán a meter doblada otra vez.

    Así que ¿escupes o tragas? La pregunta es ociosa, el pueblo siempre traga.

  • La capacidad que tienes de abstraerte de una realidad que todos estamos viviendo a la hora de escribir esto es sencillamente brillante! Buen trabajo.

  • Pensé con ilusión que era un diagnóstico de por qué murió el indignado. El único modo de que resucite en tres días es, toda vez que ya no creemos en cuentos de hadas, conocer los motivos. Ni una sola razón, creo que has perdido un titular o has perdido un artículo, porque no casa el uno con el otro

  • Ohhh! Escriber en Orsai. Todos los días miro si me ha llegado por correo. Prefiero leerte en papel.

  • de acuerdo con el primer anónimo… te ha quedado muy simplista Jose. Y tú sabes hacerlo mucho mejor.
    Un abrazo

  • No me lloren, señores: se pone a una sola página (no dos) y se lee ferpectamente.

  • Si es lo que tiene, al papel lo que es para el papel y a la pantalla lo que es para la pantalla, así que… mal enfoque. No obstante como si te leyera tú, no es difícil imaginar de que va.

    Pero no insistas, ningún español te reconocerá jamás que no sabe la formula del interés simple. Eso si, sabrá arreglarte la economía mundial en lo que tarda en engullirse el pincho de tortilla y su Mahou.

  • joder con los torpes, el artículo se lee perfectamente con el puto ratón o con el teclado o como os salga de los cojones, cómo queréis garrulos que se den subvenciones en este país para construir cohetes si no sabéis ni guiar una flechita de mierda por una pantalla?

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